Primera dimisión por la censura a Telemadrid en Castilla-La ManchaFuente: El Digital de Castilla La Mancha

La falta de visión de la señal de Telemadrid en determinados territorios de Castilla-La Mancha a partir de la actitud de Telecom-Castilla-La Mancha, propietaria de la red, ha suscitado diversas controversias, también políticas. La operadora regional de telecomunicaciones ha sido la señalada como responsable directa de esta situación, una empresa cuya mayoría accionarial detecta la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha con un 45 por ciento, seguida por Teleseñal (35%) y Caja Castilla La Mancha (20% restante). Las discrepancias surgidas por ver el canal autonómico madrileño ya ha cobrado su primera víctima en la persona de su consejera, apoderada y expresidenta de la sociedad, la ciudadrealeña Petra Mateos Aparicio que el pasado 15 de febrero presentó su dimisión.

La empresa, con sede social en Toledo, se constituyó en el año 2000 y tuvo unas ventas estimadas en 2009 de 13,9 millones de euros con un censo laboral de 35 operarios.

En su consejo de administración sigue como consejero Rafael Ariza Fernández, ex director general para la Sociedad de la Información y las Telecomunicaciones de la Junta de Comunidades cesado en 2009, y Francisco Hernanz Manzano, ex directivo de CCM y mano derecha del anterior presidente, Juan Pedro Hernández Moltó.

También figuran como consejeros de la sociedad Eloy Rodríguez Barrena, Juan Francisco Jiménez Sánchez, Juan José Clavería García, Manuel Laguna Monroy y Alejandro López Hernández, como secretario.

La auditora de cuentas es la firma Abaco Auditores Consultores, empresa propiedad del anterior alcalde de Toledo, Juan Ignacio de Mesa.

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NUESTRO COMENTARIO:

Bien muy bien que vayan rodando las cabezas de los resposables de este incalificalble censura mediática, pero el que tiene que dimitir es el responsable máximo, Barreda.

Lo primero que tiene que hacer nuestro aristocrático presidente es que apagar los emisores que producen la interferencia, luego pedir disculpas a los ciudadanos, y por último, si le queda un ápice de vergüenza torera democrática, dimitir por cuatro razones.

Primero por secuestrar al pueblo de guadalajara y Toledo su libertad de expresión y de información. Segundo por incumplir la ley de forma consciente, reitirativa y continuada. Tercero por engañar descaradamente a los castellanos manchegos en la pantomima del pasado jueves en Guadalajara. Y cuarto, por amor a su propio partido, en el que tengo amigos y conocidos, al que ha votado en varias ocasiones, y al que espero poder seguir votando en el futuro, cuando tenga unos líderes que escuchen al pueblo y que no nos mientan de forma tan descarada como está haciendo Barreda.

Castilla La Mancha se merece un presidente que no le mienta tanto, que le diga siempre la verdad. Y no se pueden decir más mentiras por minuto, que las que dijo Barreda en la pantomima del jueves 11 de marzo. Estoy dispuesto incluso a debatir públicamente con Barreda para demostrarle que faltó a la verdad en esa pantomima. ¿Aceptará Barreda esta invitación al debate?