El pasado 18 de enero, la senadora del PP, Carmen Riolobos, formulaba una pregunta oral en la Cámara Alta al Ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián: “¿Ha autorizado el Gobierno de España a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a emitir en el Múltiplex 63, adjudicado a Telemadrid, en las provincias de Guadalajara y Toledo?”. La respuesta del ministro Sebastián no pudo ser más reveladora: “No, no hemos autorizado dichas emisiones y efectivamente el Ministerio ha detectado dos emisiones ilegales en el Múltiplex 63 en las provincias de Guadalajara y Toledo, concretamente en Cabanillas del Campo y en el Cerro de los Palos en Toledo y en aras a la legalidad, se emitirá un segundo requerimiento para que cesen esas emisiones ilegales”.
Tras este apagón de señal, parece haber una clara intencionalidad política.
Más claro, agua. Esto se llama censura, porque priva a los ciudadanos de Guadalajara al derecho a la información establecido en nuestra Constitución. Es el poder político instalado en el Palacio de Fuensalida quien “manda en el mando a distancia” de las televisiones de los hogares de Guadalajara. Hoy la señal interferida y censurada es la de Telemadrid. ¿A quién le tocará mañana?
http://www.guadanews.es/noticia/1676/EDITORIAL/detrás-apagón-telemadrid.html
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